Laura Esquivel
C OMO A GUA P ARA C HOCOLATE
Laura Esquivel se inici como guionista. Su guin Chido One fue nominado para el premio Ariel que otorga la Academia Mexicana de Ciencias y Artes Cinematogrficas. En el ao 1992, la version flmica de Como Agua Para Chocolate arras con los premios ganando un total de diez Arieles, incluyendo el de mejor guin para Laura Esquivel.
Las recetas contenidas en este libro son recetas tradicionales
mexicanas que no han sido probadas por el editor.
Copyright 1989 por Laura Esquivel
Todos los derechos reservados conforme a las Convenciones de Registro
Literario Internacionales y de Pan-Amrica (International and Pan-American
Copyright Conventions). Publicado en los Estados Unidos de Amrica por
Anchor Books, una divisin de Random House, Inc., New York, y posteriormente
publicado en tapa blanda por Vintage Espaol, una divisin de Random House,
Inc., Nueva York.
Originalmente publicado en Mexico por Planeta, en 1989.
Publicado por primera vez en ingls
por Doubleday, una divisin de Random House, Inc.,
New York, en 1992. Traduccin inglesa copyright 1992 por
Doubleday, una divisin de Random House, Inc.
Vintage es una marca registrada y Vintage Espaol y su colofn son marcas de
Random House, Inc.
eISBN: 978-0-307-77401-9
www.grupodelectura.com
v3.1
A la mesa y a la cama
Una sola vez se llama
CONTENTS
INGREDIENTES:
1 Lata de Sardinas
de Chorizo
1 Cebolla Organo
1 Lata de Chiles Serranos
10 Teleras
MANERA DE HACERSE:
La cebolla tiene que estar finamente picada. Les sugiero ponerse un pequeo trozo de cebolla en la mollera con el fin de evitar el molesto lagrimeo que se produce cuando uno la est cortando. Lo malo de llorar cuando uno pica cebolla no es el simple hecho de llorar, sino que a veces uno empieza, como quien dice, se pica, y ya no puede parar. No s si a ustedes les ha pasado pero a m la mera verdad s. Infinidad de veces. Mam deca que era porque yo soy igual de sensible a la cebolla que Tita, mi ta abuela.
Dicen que Tita era tan sensible que desde que estaba en el vientre de mi bisabuela lloraba y lloraba cuando sta picaba cebolla; su llanto era tan fuerte que Nacha, la cocinera de la casa, que era medio sorda, lo escuchaba sin esforzarse. Un da los sollozos fueron tan fuertes que provocaron que el parto se adelantara. Y sin que mi bisabuela pudiera decir ni po, Tita arrib a este mundo prematuramente, sobre la mesa de la cocina, entre los olores de una sopa de fideos que se estaba cocinando, los del tomillo, el laurel, el cilantro, el de la leche hervida, el de los ajos y, por supuesto, el de la cebolla. Como se imaginarn, la consabida nalgada no fue necesaria pues Tita naci llorando de antemano, tal vez porque ella saba que su orculo determinaba que en esta vida le estaba negado el matrimonio. Contaba Nacha que Tita fue literalmente empujada a este mundo por un torrente impresionante de lgrimas que se desbordaron sobre la mesa y el piso de la cocina.
En la tarde, ya cuando el susto haba pasado y el agua, gracias al efecto de los rayos del sol, se haba evaporado, Nacha barri el residuo de las lgrimas que haba quedado sobre la loseta roja que cubra el piso. Con esta sal rellen un costal de cinco kilos que utilizaron para cocinar por bastante tiempo. Este inusitado nacimiento determin el hecho de que Tita sintiera un inmenso amor por la cocina y que la mayor parte de su vida la pasara en ella, prcticamente desde que naci, pues cuando contaba con dos das de edad, su padre, o sea mi bisabuelo, muri de un infarto. A Mam Elena, de la impresin, se le fue la leche. Como en esos tiempos no haba leche en polvo ni nada que se le pareciera, y no pudieron conseguir nodriza por ningn lado, se vieron en un verdadero lo para calmar el hambre de la nia. Nacha, que se las saba de todas todas respecto a la cocinay a muchas otras cosas que ahora no vienen al casose ofreci a hacerse cargo de la alimentacin de Tita. Ella se consideraba la ms capacitada para formarle el estmago a la inocente criaturita, a pesar de que nunca se cas ni tuvo hijos. Ni siquiera saba leer ni escribir, pero eso s sobre cocina tena tan profundos conocimientos como la que ms. Mam Elena acept con agrado la sugerencia pues bastante tena ya con la tristeza y la enorme responsabilidad de manejar correctamente el rancho, para as poderle dar a sus hijos la alimentacin y educacin que se merecan, como para encima tener que preocuparse por nutrir debidamente a la recin nacida.
Por tanto, desde ese da, Tita se mud a la cocina y entre atoles y ts creci de lo ms sana y rozagante. Es de explicarse entonces el que se le haya desarrollado un sexto sentido en todo lo que a comida se refiere. Por ejemplo, sus hbitos alimenticios estaban condicionados al horario de la cocina: cuando en la maana Tita ola que los frijoles ya estaban cocidos, o cuando a medio da senta que el agua ya estaba lista para desplumar a las gallinas, o cuando en la tarde se horneaba el pan para la cena, ella saba que haba llegado la hora de pedir sus alimentos.
Algunas veces lloraba de balde, como cuando Nacha picaba cebolla, pero como las dos saban la razn de esas lgrimas, no se tomaban en serio. Inclusive se convertan en motivo de diversin, a tal grado que durante su niez Tita no diferenciaba bien las lgrimas de la risa de las del llanto. Para ella rer era una manera de llorar.
De igual forma confunda el gozo del vivir con el de comer. No era fcil para una persona que conoci la vida a travs de la cocina entender el mundo exterior. Ese gigantesco mundo que empezaba de la puerta de la cocina hacia el interior de la casa, porque el que colindaba con la puerta trasera de la cocina y que daba al patio, a la huerta, a la hortaliza, s le perteneca por completo, lo dominaba. Todo lo contrario de sus hermanas, a quienes este mundo les atemorizaba y encontraban lleno de peligros incgnitos. Les parecan absurdos y arriesgados los juegos dentro de la cocina, sin embargo, un da Tita las convenci de que era un espectculo asombroso el ver cmo bailaban las gotas de agua al caer sobre el comal bien caliente.
Pero mientras Tita cantaba y sacuda rtmicamente sus manos mojadas para que las gotas de agua se precipitaran sobre el comal y danzaran, Rosaura permaneca en un rincn, pasmada por lo que observaba. En cambio Gertrudis, como todo aquello donde interviniera el ritmo, el movimiento o la msica, se vio fuertemente atrada hacia el juego y se integr con entusiasmo. Entonces a Rosaura no le qued otra que tratar de hacer lo propio, pero como casi no se moj las manos y lo haca con tanto miedo, no logr el efecto deseado. Tita entonces trat de ayudarla acercndole las manos al comal. Rosaura se resisti y esta lucha no par hasta que Tita, muy enojada, le solt las manos y stas, por inercia, cayeron sobre el ardiente comal. Adems de ganarse una soberana paliza, Tita qued privada de jugar con sus hermanas dentro de su mundo. Entonces Nacha se convirti en su compaera de diversin. Juntas se dedicaban a inventar juegos y actividades siempre en relacin con la cocina. Como el da en que vieron en la plaza del pueblo a un seor que formaba figuras de animales con globos alargados y se les ocurri repetir el mecanismo pero utilizando trozos de chorizo. Armaron no slo animales conocidos sino que adems inventaron algunos con cuello de cisne, patas de perro y cola de caballo, por citar slo algunos.