Nunca aparecern en este lugar todos cuantos me ayudaron, de una manera u otra, en la redaccin final de este libro. Directa o indirectamente se encuentran implcitas en sus pginas decenas de personas que en un aula, en una charla o una acalorada discusin aportaron algo sin saberlo. Sin embargo, quiero hacer especial mencin a mi hermano Francisco La Rubia por su constante apoyo y por sus raudas respuestas a la lluvia de cuestiones que con frecuencia le lanzo. A Jos Juan Noguera por sus sugerencias y crticas. A Tanya Pak por su apoyo en la traduccin de los dilogos de las pelculas en lengua rusa. A Mara del Carmen Lara por su apoyo en todo tipo de cuestiones, as como al Departamento de Filosofa II de la Universidad de Granada, y a nuestro director, lvaro Vallejo. A Jos Garca Leal y Jos E Ziga del rea de Esttica y Teora de las Artes de la Universidad de Granada. A Juanjo Vicente por facilitarme algunas pelculas que yo no logr conseguir. Tambin quiero agradecer su apoyo y colaboracin a Phil Hall y Luis Sez Rueda. Finalmente, a Jonathan Parker mi admiracin y agradecimiento por sus sugerencias, y a Jaroslav Rna por su escultura de Kafka que sirve como cubierta del libro, as como a Ana Beln Tello por su fantstico diseo de portada (www.anatello.com).
GEORG LUKCS
Ensayo sobre Kafka y el cine
ES LO KAFKIANO CINEMATOGRFICO? UNA APROXIMACIN
Antes de llevar a cabo una breve, aunque necesaria incursin en el concepto mismo de lo kafkiano, doy por sentado que, aproximadamente, la mayora de los lectores de este libro tienen una idea ms o menos vaga, ms o menos desarrollada de qu pueda ser eso que de un tiempo a ac se menciona, cada vez con mayor profusin, en todos los medios de comunicacin visuales, escritos o radiofnicos y, por supuesto, en la conversaciones entre amigos, que no es otra cosa que lo kafkiano, concepto este, generalmente, aplicado a situaciones.
Como el concepto mismo se aplica generalmente a situaciones, aunque no solamente, el arte, por su condicin simblica, se ha hecho eco de manera muy significativa y sugerente de este tipo de situaciones, de tal manera que lo kajkiano podemos encontrarlo no slo en la obra del escritor checo en lengua alemana Franz Kafka, aunque no toda su obra sea kajkiana, extremo este que abordaremos ms adelante, sino en la obra de muchos otros autores, pero no solo en la literatura, sino, incluso en las artes plsticas y, por supuesto, en el cine.
Podra dar la sensacin de que el cine, por su propia naturaleza (es un medio que incorpora desde lo visual, a lo sonoro y ms all de esto, puede incluir la percepcin de todas las dems artes, salvo lo tctil) y tal y como es concebido en la actualidad, es una especie de cajn de sastre donde todo cabe. Esto es, quizs, debido a que el cine ha sufrido muchas vicisitudes a lo largo de sus poco ms de cien aos de historia en la que ha recorrido todo tipo de orientaciones, funciones, reorientaciones, etc. En la actualidad asistimos a un panorama en el que los efectos especiales tienen una importancia, por diversas razones, que ensombrece o mitiga la proyeccin de otras formas de entender el cine que no incluyen esos efectos que parecen ser tan del agrado de las mayoras.
No perdamos de vista, no obstante, que el cine en su corta pero intenssima vida en comparacin con otra artes, no ofrece, afortunadamente, una nica orientacin en cuanto a su pblico. El cine, por el contrario, ofrece la posibilidad de pblicos muy diversos y que ms all de su orientacin meramente comercial (industria del entretenimiento, no siempre artstica) nos da la oportunidad, lamentablemente con no demasiada frecuencia, de vrnoslas con autnticas obras de arte o, en su defecto dentro de esta orientacin, con producciones dignsimas que una vez visualizadas merodean por nuestra cabeza durante mucho tiempo prestndose a la reflexin, a la discusin, al debate, en definitiva, de ideas propio de toda obra de arte.
Como ya nos hiciera ver Ortega y Gasset, lo importante en una obra de arte no es necesariamente lo que dice, sino cmo lo dice. En ese sentido, la mejor obra literaria adaptada al cine puede ser un autntico fiasco, mientras que una mediocre obra puede ser el germen -en manos de un buen director que atraviese por un buen momento de su carrera-, de una gran pelcula. El cine, adems, por la versatilidad de sus medios, puede plasmar las ms variopintas obras, desde lo ms incomprensible y minoritario, tipo Dad (Symphonie diagonale, de Viking Eggeling; Anemic cinema, de Marcel Duchamp; Emak Bakia, de Man Ray o Ballet Mecanique, de Fernand Lger), a las ms modernas superproducciones hollywoodienses que son, a la postre, vistas por millones de espectadores alrededor del mundo................