Gary Chapman es un ministro ordenado y consejero matrimonial. Es el autor del bestseller Los cinco lenguajes del amor, que ha vendido ms de cuatro millones de copias y fue el primero de una popular serie de libros sobre los lenguajes del amor. Es el presentador de un programa de radio y un solicitado conferenciante. Vive en Winston-Salem, Carolina del Norte.
TAMBIN DE G ARY C HAPMAN
Los cinco lenguajes del amor
PRIMERA EDICIN VINTAGE ESPAOL, NOVIEMBRE 2008
Copyright de la traduccin 2008 por Joan Quesada Navidad
Todos los derechos reservados. Publicado en los Estados Unidos de Amrica por Vintage Espaol, una divisin de Random House, Inc., Nueva York y en Canad por Random House of Canada Limited, Toronto. Originalmente publicado en ingls en EE.UU. como Love as a Way of Life, por Doubleday y WaterBrook Multnomah, sellos de The Doubleday Publishing Group, una divisin de Random House, Inc., Nueva York, en 2008. Copyright 2008 por Gary Chapman. Traduccin cedida por Ediciones Urano, S. A., Barcelona.
Vintage es una marca registrada y Vintage Espaol y su colofn son marcas de Random House, Inc.
Informacin de catalogacin de publicaciones disponible en la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos.
eISBN: 978-0-307-77405-7
www.grupodelectura.com
v3.1
A Davy Grace, Elliot Isaac y a los nios de su generacin,
con la esperanza de que puedan crear
un mundo donde el amor sea una forma de vida.
ndice
CAPTULO 2 La amabilidad
Descubrir la dicha de pensar en los dems antes que en ti mismo
CAPTULO 3 La paciencia
Aceptar los defectos de los dems
CAPTULO 4 El perdn
Dejar de ser presa de la ira
CAPTULO 5 La cortesa
Tratar a los dems como a amigos
CAPTULO 6 La humildad
Situarse por debajo para que alguien pueda situarse por encima
CAPTULO 7 La generosidad
Entregarse a los dems
CAPTULO 8 La sinceridad
Mostrarse como la persona que en realidad s es
Agradecimientos
No podra haber escrito este libro sin los montones de personas que me han enseado el amor como forma de vida. Mi primera impresin del amor vino de mis paps, Sam y Grace. Mientras mi pap ya muri, sigo intentando devolverle a mi mam el amor que ella me dio. Karolyn, mi esposa durante ms de cuatro dcadas, ha sido mi ms ntima fuente de amor. Habla mis lenguajes del amor, y lo hace sin forzar. Las vidas de amor de mis dos hijos, Shelley y Derek, me proporcionan una gran satisfaccin. Nada puede hacer ms feliz a un pap.
Estoy en deuda con Jim Bell, quien no solo comparti la idea del libro, pero adems me apoy en cada giro del camino. Tricia Kube ha sido mi asistente durante veintisis aos. Computeriz el manuscrito y, como siempre, manej los detalles administrativos dejando que yo me concentrara en la escritura. Kay Tatum fue de inmensa ayuda en el rea tcnica.
En el proceso de escritura, Elisa Fryiling Stanford comparti sus habilidades editoriales y narrativas para darle cohesin al manuscrito. Trace Murphy y el equipo editorial de Doubleday hicieron un trabajo excepcional al darle forma al producto final.
Tambin debo agradecer a la mucha gente que ha compartido conmigo sus observaciones sobre el amor a travs del camino de la vida. En mis seminarios y en Internet, he pedido historias de gente que han cazado a otros expresando el amor como forma de vida. Despus de todo, son los ejemplos de la vida real los que nos tocan el corazn y nos motivan a aspirar al amor. Sin su ayuda, este libro no tendra vida. Espero que sean recompensados al ver sus historias animando a otros a buscar el amor como forma de vida.
Introduccin
Al subir al avin en Phoenix, mi hija Shelley y yo sentamos que habamos tenido suerte de que nos hubieran colocado en primera clase. Sin embargo, a m me haban dado el asiento 4A y a mi hija el 7A, ambos junto a la ventana. Los veintiocho asientos de primera clase estaban llenos, as que esperbamos que alguien fuera tan amable de cambiarnos el asiento para poder estar juntos en un vuelo que duraba veinticuatro horas.
Shelley le pregunt al hombre que tena el asiento de pasillo junto al 7A:
Le importara cambiar su asiento para que pueda sentarme con mi padre?
Es un asiento de pasillo?respondi el hombre.
No, de ventana.
Lo siento, pero nodijo l. No me gusta tener que pasar por encima de la gente para salir.
Lo comprendocontest Shelley, y se sent en el asiento que le haba tocado.
Poco despus lleg el hombre al que le haban asignado el asiento de pasillo que haba junto al mo, y le dije:
Le gustara sentarse en el 7A para que mi hija y yo podamos estar juntos?
Mir hacia el asiento 7A y dijo:
Ser un placer.
Se lo agradezco muchocontest.
No es ningn problemarespondi l, con una sonrisa, mientras recoga el peridico y se diriga hacia el 7A.
Un rato despus reflexionaba sobre lo sucedido. Cmo se explicaban las dos respuestas distintas? Ambos hombres tenan ms o menos la misma edad: cincuenta y muchos o sesenta y pocos, supona. Ambos iban vestidos como hombres de negocios. Sin embargo, uno de ellos se haba aferrado tenazmente a su asiento de pasillo, mientras que el otro haba cedido libremente el pasillo para satisfacer nuestros deseos.
Poda ser que uno de los hombres tuviera una hija y el otro no? Era tal vez que el hombre que haba cedido libremente el asiento prefera en realidad un asiento de ventana? O era simplemente que haban ido a distintos parvularios y tenan madres diferentes? Acaso a uno lo haban enseado a compartir y ayudar a la gente, mientras que el otro haba aprendido a luchar por ser el nmero uno? Tal vez uno tena un gen del amor que el otro no haba heredado?
Durante dcadas he observado casos parecidos, de mayor o menor importancia, y me he preguntado: cul es la diferencia entre las personas que regalan amor y las que raras veces muestran una actitud de inters y preocupacin por los dems? Cules son las cualidades de las personas que demuestran amor? Cmo se han desarrollado esos rasgos de carcter?
El ao pasado, en un intento de responder a todas esas preguntas, hice un viaje por todo el pas para observar los comportamientos, hablar con la gente, leer los estudios existentes y examinar las enseanzas y prcticas religiosas. Tambin me he basado en mis treinta y cinco aos de experiencia como asesor matrimonial y familiar.
A lo largo del presente estudio sobre el amor, he dado nombre a las que creo que son las siete cualidades de una persona amante:
- La amabilidad
- La paciencia
- El perdn
- La cortesa
- La humildad
- La generosidad
- La sinceridad
Esas siete cualidades no consisten en sentimientos vagos ni buenas intenciones. Son hbitos que aprendemos a practicar cuando decidimos transformarnos en personas que aman genuinamente. Son cualidades prcticas y fundamentales que podemos hacer efectivas en la vida diaria. Sin embargo, el resultado de convertir esas cualidades en un hbito es extraordinario: la satisfaccin en nuestras relaciones.
El amor tiene mltiples caras. Es como un diamante, que tiene muchas superficies pero una sola belleza. De forma parecida, cuando aunamos las siete cualidades esenciales del amor, el resultado es una persona que ama verdaderamente. Todas y cada una de las cualidades son indispensables. Si a tus relaciones les falta una de ellas, les falta algo importante.