Piensa y razona como Scrates
Manual para un dilogo inteligente
Elke Wiss
Traduccin de Mara Teresa Palomas
Ttulo original: Socrates op sneakers,
publicado en neerlands por Ambo | Anthos Uitgevers, en msterdam, en 2020
SOCRATES OP SNEAKERS 2020 by Elke Wiss
Originally published by Ambo | Anthos Uitgevers, Amsterdam
Primera edicin en esta coleccin: marzo de 2023
Esta publicacin ha sido posible con el apoyo financiero de la Dutch Foundation for Literature.
de la traduccin, Mara Teresa Palomas, 2023
de la presente edicin: Plataforma Editorial, 2023
Plataforma Editorial
c/ Muntaner, 269, entlo. 1 08021 Barcelona
Tel.: (+34) 934947999
www.plataformaeditorial.com
ISBN: 978-84-19271-87-7
Diseo y realizacin de cubierta:
Pablo Nanclares
Fotocomposicin:
Grafime Digital S. L.
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Ten paciencia con todo aquello
que no se ha resuelto en tu corazn
e intenta amar las preguntas por s mismas,
como si fueran habitaciones cerradas
o libros escritos en una lengua extranjera.
No busques ahora las respuestas
que no ests preparado para vivir,
pues la clave es vivirlo todo.
Vive las preguntas ahora.
Tal vez las encuentres, gradualmente, sin notarlas,
y algn da lejano llegues a las respuestas.
RAINER MARIA RILKE,
Cartas a un joven poeta
Prefacio
Ms all de las ideas del bien y del mal, hay un maravilloso jardn. Y all te encontrar.
RUMI
Poeta y mstico suf de origen persa
Adelante, haz esa pregunta.. Scrates estaba sentado detrs de m. Llevaba unas bambas de colores chillones y una capa de Batman. Venga, tienes una buena razn para ello. Parpade. Scrates, s que t eres de hace unos dos mil quinientos aos atrs. Quiz te has perdido alguna cosa, pero, en la sociedad actual, esta no es una pregunta que haces as como as.
Eso sucedi hace ya muchos aos. Segua un curso de filosofa prctica. Mi primer contacto con este concepto. Buscaba algunos conocimientos tericos y experiencia sobre cmo llevar a cabo conversaciones filosficas y aprender a pensar con claridad. Como persona que se dedica al teatro, quera algunas herramientas para tener ms lucidez en mis propios procesos de pensamiento durante la creacin de espectculos, y tambin quera poder hacer preguntas ms ingeniosas a mis actores. As que me apunt a ese curso: Filosofa Prctica.
Durante la pausa del almuerzo del primer da del curso, me encontr en una mesita con otros cinco cursistas: un hombre y cuatro mujeres. El tpico en la mesa: los hijos. Se hizo una ronda: Tienes hijos?. S, un hijo. Y t?, S, dos hijas de ocho y diez aos. A todos se les hicieron algunas preguntas ms: Cuntos aos tienen?, Van a la escuela?, El tuyo tiene ya un iPad?.
Ya conoca este tipo de dilogos. Estaba cerca de cumplir los treinta y haba tenido varias conversaciones parecidas. Tan pronto como alguien dice: No, no tengo hijos se produce un silencio incmodo, o rpidamente se hace una pregunta a la siguiente persona. Eso me asombraba: a las personas con hijos les gusta hablar de ellos, pero las historias de las que no los tienen preferimos no contarlas. Y entonces ya lo pensaba: tambin tienen algo que decir. Por qu decidimos nosotros, al no preguntarles nada ms, que no hay espacio para dejar que nos cuenten?
Me lleg el turno y dije que no tena hijos. Tom aliento para aadir algunas frases ms. Por aquel entonces daba clases de teatro en escuelas y trabajaba mucho con nios y nias, as que tena un montn de historias interesantes que me habra encantado compartir.
Tambin tena curiosidad por las explicaciones y las experiencias de los dems y me habra gustado expresar mis dudas acerca de tener o no tener hijos. Cmo sabes si quieres tener hijos o no? Es una decisin tan importante, y, bueno, es como ponerse un tatuaje en la frente, es algo muy definitivo, verdad? Tienes que pensrtelo muy bien, cmo llegasteis vosotros a tomar esta decisin?
Pero, antes de que pudiera seguir hablando, se hizo rpidamente la pregunta Y t? a la siguiente persona. Todos miraron muy concentrados a mi vecina, que entretanto hablaba entusiasmada sobre su hija de siete aos. Mi mirada se evit cuidadosamente, por lo que pareca, mi historia no encajaba en la conversacin. Se me haca raro; tenamos ms o menos la misma edad, en todo caso con intereses similares, ya que nos encontrbamos siguiendo el mismo curso. Un contexto ideal para conversaciones profundas, en un ambiente en el que no tendras que encontrarte obstaculizado por normas establecidas y hbitos de conversacin.
Sent bullir en m una especie de indignacin: por qu empezar una conversacin sobre los hijos y que solo pueda participar un club selecto en ella? Por qu determinar silenciosamente qu historias merecen el espacio para ser contadas y cules deben ser evitadas? Por qu no dejar decidir a quien le concierne si quiere compartir algo o no?
Despus de que mi vecina hubo hablado sobre su hija, se hizo la pregunta a la siguiente persona. Una mujer de unos cuarenta aos, con unos rizos juguetones, castaos, que respondi: No, no tengo hijos, y el grupo ya se dispona a ir a por el siguiente.
Entonces, el tiempo se ralentiz por un momento. Adelante, haz esa pregunta. Tienes una buena razn para ello, o detrs de m. Scrates sonrea para animarme. Y creo que con regodeo. Le mir y le expliqu que esto no es muy normal en estos tiempos. No puedo hacerlo, dije.
Scrates me mir. Se coloc bien la capa, limpi una mancha de sus bambas.
Este es exactamente vuestro problema. Habis pensado una norma que dicta que hay preguntas que crean tensin y son inapropiadas, mientras que otras son buenas y estn permitidas. Y eso solo porque creis que sobre todo no debes herir los sentimientos del otro, que las preguntas deben ser amigables y que los temas que son ms autnticos, quiz dolorosos, deben evitarse, aunque justamente por eso son importantes y crean conexin.
S, pero
La pregunta que quieres formular es una pregunta acerca de un hecho. Verdad?
Eh, s.
Y cmo puede una pregunta que se refiere a un hecho ser una pregunta equivocada?
Esto, eh, pues no lo s.
Exactamente. La pregunta elegiste no tener hijos? no se encuentra necesariamente en una categora diferente a elegiste este color de cabello, pantaln, lugar de residencia o trabajo? La pregunta en s no puede hacer nada para evitar que se le asocien todo tipo de emociones dolorosas, que se ande con pies de plomo al tratar el tema y que se le aada una regla no escrita. No es de extraar que muchos de vosotros necesitis profundizar ms. Converts vuestras conversaciones en un campo de minas. Por temor a una explosin, las mantenis sobre todo agradables y seguras. Y, por lo tanto, superficiales. Y, por ello, aburridas.