Es uno de los ms importantes investigadores del pensamiento y la literatura nahuas. Es doctor en filosofa con especialidad en historia y pensamiento prehispnicos, miembro de la Academia Mexicana de Historia e investigador emrito de la UNAM. Su destacada trayectoria le ha valido reconocimientos y la obtencin de doctorados honoris causa en varias universidades hispanoamericanas. El FCE tambin ha publicado sus libros: Los antiguos mexicanos a travs de sus crnicas y cantares (1961), Huehuehtlahtolli. Testimonios de la antigua palabra [en coautora con L. Silva Galeana (introduccin y traduccin), 1991], Literaturas indgenas de Mxico (1992), Tonantzin Guadadalupe. Pensamiento nhuatl y mensaje cristiano en el Nican mopohua (2000) y Motivos de la antropologa americanista. Indagaciones en la diferencia (coordinador, 2001).
MIGUEL LEN-PORTILLA
El destino de la palabra
DE LA ORALIDAD Y LOS GLIFOS MESOAMERICANOS
A LA ESCRITURA ALFABTICA
EL COLEGIO NACIONAL
FONDO DE CULTURA ECONMICA
Primera edicin, 1996
Quinta reimpresin, 2013
Primera edicin electrnica, 2015
D. R. 1996, El Colegio Nacional
Luis Gonzlez Obregn 23; Centro Histrico
D. R. 1996, Fondo de Cultura Econmica
Carretera Picacho-Ajusco, 227; 14738 Mxico, D. F.
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ISBN 978-607-16-2730-8 (ePub)
Hecho en Mxico - Made in Mexico
CONTENIDO
TERCERA PARTE: LA RELIGIN DE LOS NICARAOS.
ANLISIS Y COMPARACIN DE TRADICIONES NAHUAS
INTRODUCCIN
Del destino de la palabra la expresada por los forjadores de cantos, los sabios, los escribanos y pintores de los cdices se preocuparon muchos, consumada la invasin de Anhuac. Unos quisieron erradicarla, hacer que no quedara vestigio de ella. Los cantares deban silenciarse y los viejos libros con pinturas y caracteres reducirse a cenizas. Por ser inspiracin del Demonio, tal deba ser su destino.
Otros, de estirpe indgena, siguieron entonando sus cantos pero a escondidas o intercalando en ellos invocaciones cristianas y sustituyendo a veces los nombres de sus dioses con los de Tiox (Dios), san Francisco o Mara. Tambin hubo algunos que ocultaron sus libros para seguir normando sus vidas segn lo que all se enseaba. Por ser tesoro inestimable, perdurar deba ser su destino.
Ambivalente fue la actitud de algunos frailes. Un ejemplo de esto lo tenemos en el encargo que fray Martn de Valencia y el obispo Sebastin Ramrez de Fuenleal hicieron a fray Andrs de Olmos en 1533. Se le orden que sacase en un libro las antigedades de estos naturales indios, en especial de Mxico, Tetzcuco y Tlaxcala. El propsito era doble. Alcanzado dicho conocimiento, lo malo y fuera de tino se podra mejor refutar y, si algo bueno se hallase, se pudiera notar, como se notan y tienen en memoria las cosas de otros gentiles (Mendieta, 1941, I, prlogo sin foliar). De esta suerte el saber y la palabra indgenas podran tener un doble destino. Seran refutados y proscritos en lo que de malo tenan y, si algo bueno hubiese, recordados como ocurra con el legado de otros paganos.
Con criterio semejante procedieron otros frailes, entre ellos Bernardino de Sahagn. Comparndose ste con el mdico [que] no puede aplicar sus medicinas al enfermo sin que primero conozca de qu humor o de qu causa proceda la enfermedad, emprendi sus pesquisas para identificar los males espirituales de los indgenas, la idolatra y ritos idoltricos y supersticiones idoltricas y ageros y abusiones y ceremonias idoltricas (Sahagn, 1989, I, 31). Ello permitira a los frailes confutar este maldito vicio (I, 68), el de la idolatra, con el que los diablos engaaron a vuestros antepasados, como lo escribi dirigindose a los mexicanos, tlaxcaltecas y los que habitis la tierra de Mechuacn y todos los dems indios de estas Indias Occidentales (1989, I, 65).
Digno de notarse es que quien, segn lo escribi, con tal criterio gui sus investigaciones, en el transcurso de los aos fue sintindose atrado por mucho de lo que iba descubriendo. De tal actitud dan testimonio numerosas expresiones suyas. En el mismo prlogo al libro I de su Historia, en el que se compar con el mdico, escrito por fray Bernardino entre 1576 y 1579, cuando puso en limpio sus manuscritos dice que: aprovechar mucho toda esta obra para conocer el quilate de esta gente mexicana, el cual an no se ha conocido.
En su opinin, la situacin en que se encuentran, sometidos ya a los espaoles, ha impedido valorar lo que realmente son:
Fueron tan atropellados y destruidos ellos y todas sus cosas, que ninguna apariencia les qued de lo que eran antes. As estn tenidos por brbaros y por gente de bajsimo quilate, como segn verdad en las cosas de polica [cultura] echan el pie delante [aventajan] a muchas otras naciones que tienen gran presuncin de polticas, sacando fuera algunas tiranas que su modo de regir contena. En esto poco, que con gran trabajo se ha rebuscado, parece mucho la ventaja que hicieran, si todo se pudiera haber (1989, I, 33).
En paralelo con esta apreciacin hay otras a lo largo de la Historia, en especial en los prlogos a algunos de sus libros. En el que consta escribi en 1577 al sexto de ellos, dice:
Entre los mexicanos, entre los cuales los sabios, retricos y virtuosos y esforzados, eran tenidos en mucho. Y de stos elegan para pontfices, para seores y principales y capitanes, por de baja suerte que fuesen
Fueron, cierto, en estas cosas extremados, devotsimos para con sus dioses, celossimos de sus repblicas [sus gobiernos y gobernados], entre s muy urbanos; para con sus enemigos muy crueles; para con los suyos, humanos y severos, y pienso que por estas virtudes alcanzaron el imperio, aunque les dur poco, y ahora lo han perdido, como ver claro el que cotejase lo contendido en este libro con la vida que ahora tienen. La causa de esto no la digo por estar muy clara (1989, I, 305).
Con esta otra alusin a lo que signific la conquista espaola, hace referencia luego a la autenticidad de los textos que ofrece. Contradice as a
lo que algunos mulos han afirmado, que todo lo escrito en estos libros, antes de ste y despus de ste, son ficciones y mentiras. Hablan [ellos] como apasionados y mentirosos, porque lo que en este libro est escrito no cabe en entendimiento de hombre el fingirlo [inventar lo expresado por los nahuas], ni hombre viviente pudiera fingir lo que en l est.
Y todos los indios entendidos, si fueran preguntados, afirmaran que este lenguaje es propio de sus antepasados y obras que ellos hacan (1989, I, 365-366).
Tales obras son calificadas por l, con grande admiracin, como De la retrica y filosofa moral y teologa de la gente mexicana, donde hay cosas muy curiosas tocantes a los primores de su lengua y cosas muy delicadas tocante a las virtudes morales (1989, I, 305). Y lo que parecer tal vez ms asombroso: el mismo Sahagn, exponindose incluso, ms que a crticas, a condenaciones eclesisticas y aun del Santo Oficio, no dud en alabar el contenido de varias oraciones a Tezcatlipoca, diciendo que en ellas usan de muy hermosas metforas y maneras de hablar; contiene sentencias muy delicadas; muy extremado lenguaje